Una nueva presencia inicia su vida en la blogósfera. Es un ser que desde hace meses ha sufrido la tentación de mostrarse en un blog. No lo ha hecho, porque piensa que no es necesario hacerlo. Y cree que no tiene fin. Hoy tampoco lo cree, pero de lo que sí tiene certeza, luego de unos meses, es que los fines es lo último que se busca. Ni siquiera se busca. No existe. El único es la muerte. Y aquí está. Intentando nada. Talvez, poniendo un poco de sazón, de incoherencia a su escritura, a sus aventuras. Lo que para ella es un deleite. También color y música a todo este ramaje de pensamientos.
Llevo algún tiempo jugueteando en los blogs de mis amigos, cansándome de ellos, reivindicándome y sobre todo, conociéndolos. No les prometo nada aquí. No sé si escriba sobre esto o aquello. Si les muestre mi gusto por la fotografía. O si les deje oír los resultados de mi trabajo en una emisora. O si hable de nada y de todo. O si, talvez, algún amigo mío sea el que me inspire a dedicarle algo. Nada sé.
Con el debido respeto de ustedes.